La Rambla: el paseo por excelencia de los barceloneses

La Rambla es, indiscutiblemente, el paseo más conocido de Barcelona. Situado en pleno centro histórico de la ciudad, une el Port Vell con la plaza de Catalunya.

04/10/2021
Imagen de La Rambla des del Mirador de Colom / Foto: TMB

En La Rambla encontrarás desde puestos de flores y actores ambulantes hasta museos y edificios históricos, pasando por sus numerosas cafeterías, que animan el paseo desde la mañana hasta bien entrada la madrugada.

Son, exactamente, 1.200 metros de calle por donde pasa casi obligatoriamente todo aquél que visita Barcelona. Así que, ¡no te lo puedes perder!

Sus orígenes

La Rambla de Barcelona se remonta al siglo XVIII. En 1766 se decidió construir una amplia travesía que siguiera el recorrido de la antigua muralla medieval, derribada seis años antes. En torno a La Rambla se reunían personas de todo tipo, ya que era una avenida muy ancha que se diferenciaba de las callejuelas estrechas de los antiguos barrios de la ciudad.

Poco a poco, los locales de ocio y cultura encontraron su lugar en este paseo. Hoy en día encontraremos edificios tan destacados como el Gran Teatre del Liceu, (la ópera barcelonesa), el Palau de la Virreina o el gran mercado de la Boqueria, entre otros.

El Barcelona Bus Turístic al final de La Rambla

Las distintas “Ramblas”

La Rambla recibe distintas denominaciones en función de sus tramos; por eso también se denomina a este paseo «Las Ramblas». Te guiamos por sus distintos tramos desde la plaza de Catalunya hasta el monumento a Colón:

La Rambla de Canaletes, con su famosa fuente de Canaletes, donde los aficionados del F.C. Barcelona se citan para celebrar sus triunfos. La tradición sostiene que el visitante que bebe agua de esta fuente regresa a Barcelona.

La Rambla dels Estudis, llamada así porque, en el siglo XV albergaba el Estudio General o Universidad. También se conoce como Rambla dels Ocells, ya que antiguamente se ubicaba en ella un mercado de pájaros. Aquí se encuentran la iglesia barroca de Betlem, de 1729; el Palau Moja, de 1784; y el edificio modernista de la Real Academia de las Ciencias y las Artes, de 1894, que acoge un pequeño observatorio astronómico y un reloj que marca la hora oficial de Barcelona.

La Rambla de Sant Josep o de les Flors, único lugar de la ciudad donde en el siglo XIX se vendían flores y que todavía hoy conserva esta actividad. En ella encontrarás el famoso Mercado de La Boqueria y el único Museo de la Erótica de España. También se erigen en este tramo el Palau de la Virreina (1778) y la popular Casa dels Paraigües, de curiosa decoración de inspiración nipona, de 1858.

Interior del Mercado de La Boqueria

La Rambla dels Caputxins (o Rambla del Centre), llamada así por un antiguo convento de frailes capuchinos, comprende desde el Gran Teatro del Liceu hasta el Pla del Teatre. En este tramo más antiguo de La Rambla, abierto como paseo, se encuentra el mosaico de Miró, el Palau Güell, el Hotel Oriente, el más antiguo de la ciudad, y la plaza Reial, donde se levantaba el convento que da nombre al tramo.

La Rambla de Santa Mònica, junto al puerto, alberga la parroquia de Santa Mònica, el Palau Marc, de 1781, la antigua fundición de cañones (1777), donde se construyó la campana mayor de la catedral de Barcelona y, cerrando el paseo, el monumento a Colón. Aquí se concentran las muy fotografiadas estatuas humanas.

Imagen interior del Gran Teatre del Liceo
La fuente de la plaza Reial

Imprescindibles de La Rambla

  • Font de Canaletas: para los aficionados el futbol y, en especial, al Barça
  • Mercado de La Boqueria: el mercado más antiguo de la ciudad; ¡una experiencia para los sentidos!
  • El Teatre del Liceu: uno de los teatros de ópera más importantes del mundo.
  • Mosaico de Joan Miró: esta obra emblemática del artista Joan Miró tiene la forma circular del cosmos. Sus colores amarillo, azul y rojo, y sus formas simples hablan el lenguaje propio del artista.
  • Plaza Reial: es una de las pocas plazas porticadas de la ciudad y conserva la elegancia y el bullicio del siglo XIX. Rodeada de bares, restaurantes y discotecas es una opción interesante para cualquier hora del día (¡y de la noche!)
El mosaico de Joan Miró simboliza el cosmos

Una última sorpresa final…

Cuando la Rambla llega al mar, encontramos el Mirador de Colom, una oportunidad magnífica de admirar desde el aire esta arteria única de la ciudad. ¡Sube al mirador y toma las mejores fotos de La Rambla y el Port Vell!

¿Cómo llegar? Tu disfruta, nosotros te llevamos: